Dirección: Largo da Libertade, 12. Aljezur - Portugal
Los que ya visitasteis Portugal, sabéis que es típico del país traerte un aperitivo a base de mantequilla y pan y después cobrártelo (más o menos, 1'5€).
Como entrante pedimos unas Sardinas Asadas, que yo tenía mono de ellas. Las pedimos pero no nos las trajeron, cuando se lo indicamos a la camarera de la que nos traía el plato principal, nos dio como excusa (mala, por cierto) que prescindieron de él ya que el pescado era muy "grande". Al final, las echamos de menos.
Pedimos de plato una Dorada para dos. Te traen los pescados antes de cocinarlos para que los veas y elijas. Los pescados grandes, te piden por favor que los pidas mínimo para 2 para no dividirlos a la mitad. La Dorada estaba realmente buena, bien hecha y fresca. Venía acompañada de una guarnición de verduras, simple, pero se agradecía.
De postres pedimos, Bolo de queso y Bolo de Patata Dulce con Almendra. Bien, pero sin más. Los dos caseros.
Para beber, pedimos vino del Algarve Joao Clara. Blanco suave y fresco que entra solo, aunque no nos dijeron gran cosa los vinos de la zona. Demasiado suaves e insípidos.
Cenamos en la terraza, y por suerte, porque es un local que suele estar lleno siempre, tanto a la hora de comer como a la de cenar. Además, tiene un albergue justo al lao, así que se recomienda reservar o ir temprano. De noche tiene una zona de copas con Djs, y es el único local que tiene algo de ambiente.
Muy bueno todo y muy barato. Pero de los dos que probamos en Aljezur, me gustó más el . No os dejéis engañar por las fotos de la web, es un chigre con encanto, pero sin esos toques modernillos que parece que le quieren dar en la web.
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