Teléfono: 985 944 690
Calidad: 3/5
Precio: 11€
Comentarios: Ponga acaba de ser declarada recientemente reserva de la Biosfera. Un paraíso no tan conocido y sin la explotación que tienen otros parques naturales en Asturies, y que, por supuesto, merece la pena visitar. Está lleno de pueblinos preciosos, de montañas emblemáticas con subidas épicas y de desfiladeros como el que os vamos a hablar hoy.
Los Beyos en lengua asturiana significan Foz o Desfiladero , por tanto, decir en castellano Desfiladero de los Beyos es una redundancia innecesaria; como Cascada del Tabayón o Cascada de A Seimeira.
Así que nos fuimos a recorrer Los Beyos de los Andamios desde Güera. La carretera para llegar es impresionante, y solo el recorrido ya merece la pena. Dejamos el coche aparcao en el pequeño parking del restaurante, que será inicio y fin de nuestra ruta. 4kms ida + 4kms vuelta. Más fácil imposible.
Desde Güera puedes hacer dos rutas, las dos igual de recomendables. Una hasta Viboli, que fue la que nosotros hicimos, y otra hasta Casielles, otro precioso pueblo al que se accede a través de 23 curvas impresionantes al modo de Lombard Street en San Francisco.
El paseo hasta Viboli tiene un par de repechinos y es de una belleza impresionante, una foz excavada entre la roca, siguiendo el curso del río Cándano (afluente del Seya), unas veces tan abajo que solo oirás su rumor, y otras a la par de él donde podrás apreciar pequeñas cascadas. Hacia abajo, el río y sus recovecos, hacia arriba, las impresionantes montañas que nos guían el camino. Y durante el camino, algún ciclista y poco más, a pesar de ser agosto.
Poco a poco, se va abriendo Viboli, un pequeño pueblo entre montañas de apenas 5 o 10 habitantes, aunque comienza a haber alguna casa de turismo rural. Se divide en dos barrios, cimeru (alto) y baxu (bajo), cada uno con su encanto, pero el principal atractivo del pueblo, además de las espectaculares vistas, son los Hórreos Beyuscos.
Únicos entre los hórreos asturianos por tener una cubierta a dos aguas en vez de la típica a cuatro. Son los hórreos primitivos, precursores de los actuales, y sin el típico corredor que caracteriza los hórreos asturianos.
De menor tamaño debido a la orografía de la zona (si vais, lo comprenderéis, imposible encontrar algo llano) y declarados Bien de Interés Cultural debido a su antigüedad. Solo hay 17 inventariados en Asturies (en Viboli hay 3 y la mayoría en la zona de Ponga). Por cierto, alguno está que se cae, como la mayoría de los hórreos de Asturies, y si conocéis el pliego de condiciones que impone el Principado para su rehabilitación entenderéis que casi nadie se pueda permitir rehabilitarlos o darles un uso turístico. Una pena.
Un espectáculo disfrutar de esas vistas y ver cómo se para el tiempo en Viboli. Pueblos únicos donde parece retroceder el tiempo, preciosos, pero con unas condiciones de vida muy duras.
Volvemos por el camino de ida, con baño incluido en alguna poza con cascada.
En el punto de inicio, se encuentra el restaurante Puente Huera. Con una terraza con unas preciosas vistas, y punto indispensable de parada de montañeros que van por la zona. Tienen zona de chigre donde además puedes comprar queso de los Beyos.
El queso de los Beyos es una IGP, a partir de leche de vaca, cabra u oveja; aunque casi todos los que vas a encontrar son de vaca. Son quesos pequeños, de textura rugosa y a veces, con un toque de moho. Intensidad media y que se utiliza mucho en cocina porque no acaba matando el sabor del acompañamiento.
Comimos el Menú del Día, un sábado. 11€.
De primero, Ensalada Rusa Clásica. Rica.
Fabada. Suave, nos la traen emplatada, aunque nos preguntan dos o tres veces si queremos repetir, cosa que hacemos, porque estaba muy buena.
El compangu muy rico, con un toque picantín, aunque repito, es una fabada suave.
De segundos, Ternera Guisada, con patatas fritas. Muy buena. La carne se deshace sola.
Escalopinos al Queso de Los Beyos. Buenísimos. Carne tierna y el queso aporta pero sin matar el plato.
De postre, Crema de Queso los Beyos con Miel. Una especie de requesón buenísimo y suavín.
Crema de Queso Los Beyos con Sirope de Chocolate. Igual, pero con el toque de chocolate.
Y Flan Casero.
Con cafés, agua y unas cervezas, pagamos 11€ por cabeza. Como veis, impagable. Y comer con esas vistas ...
Un paseo facilón, con unas vistas increíbles, un pueblín precioso y en medio de una foz llena de pequeñas cascadas y xanes, acabando en una fartura en un restaurante en medio de la montaña con una rcp excepcional. Merece la pena.
Precio: 11€
Comentarios: Ponga acaba de ser declarada recientemente reserva de la Biosfera. Un paraíso no tan conocido y sin la explotación que tienen otros parques naturales en Asturies, y que, por supuesto, merece la pena visitar. Está lleno de pueblinos preciosos, de montañas emblemáticas con subidas épicas y de desfiladeros como el que os vamos a hablar hoy.
Los Beyos en lengua asturiana significan Foz o Desfiladero , por tanto, decir en castellano Desfiladero de los Beyos es una redundancia innecesaria; como Cascada del Tabayón o Cascada de A Seimeira.
Así que nos fuimos a recorrer Los Beyos de los Andamios desde Güera. La carretera para llegar es impresionante, y solo el recorrido ya merece la pena. Dejamos el coche aparcao en el pequeño parking del restaurante, que será inicio y fin de nuestra ruta. 4kms ida + 4kms vuelta. Más fácil imposible.
Desde Güera puedes hacer dos rutas, las dos igual de recomendables. Una hasta Viboli, que fue la que nosotros hicimos, y otra hasta Casielles, otro precioso pueblo al que se accede a través de 23 curvas impresionantes al modo de Lombard Street en San Francisco.
El paseo hasta Viboli tiene un par de repechinos y es de una belleza impresionante, una foz excavada entre la roca, siguiendo el curso del río Cándano (afluente del Seya), unas veces tan abajo que solo oirás su rumor, y otras a la par de él donde podrás apreciar pequeñas cascadas. Hacia abajo, el río y sus recovecos, hacia arriba, las impresionantes montañas que nos guían el camino. Y durante el camino, algún ciclista y poco más, a pesar de ser agosto.
Poco a poco, se va abriendo Viboli, un pequeño pueblo entre montañas de apenas 5 o 10 habitantes, aunque comienza a haber alguna casa de turismo rural. Se divide en dos barrios, cimeru (alto) y baxu (bajo), cada uno con su encanto, pero el principal atractivo del pueblo, además de las espectaculares vistas, son los Hórreos Beyuscos.
Únicos entre los hórreos asturianos por tener una cubierta a dos aguas en vez de la típica a cuatro. Son los hórreos primitivos, precursores de los actuales, y sin el típico corredor que caracteriza los hórreos asturianos.
De menor tamaño debido a la orografía de la zona (si vais, lo comprenderéis, imposible encontrar algo llano) y declarados Bien de Interés Cultural debido a su antigüedad. Solo hay 17 inventariados en Asturies (en Viboli hay 3 y la mayoría en la zona de Ponga). Por cierto, alguno está que se cae, como la mayoría de los hórreos de Asturies, y si conocéis el pliego de condiciones que impone el Principado para su rehabilitación entenderéis que casi nadie se pueda permitir rehabilitarlos o darles un uso turístico. Una pena.
Un espectáculo disfrutar de esas vistas y ver cómo se para el tiempo en Viboli. Pueblos únicos donde parece retroceder el tiempo, preciosos, pero con unas condiciones de vida muy duras.
Volvemos por el camino de ida, con baño incluido en alguna poza con cascada.
En el punto de inicio, se encuentra el restaurante Puente Huera. Con una terraza con unas preciosas vistas, y punto indispensable de parada de montañeros que van por la zona. Tienen zona de chigre donde además puedes comprar queso de los Beyos.
El queso de los Beyos es una IGP, a partir de leche de vaca, cabra u oveja; aunque casi todos los que vas a encontrar son de vaca. Son quesos pequeños, de textura rugosa y a veces, con un toque de moho. Intensidad media y que se utiliza mucho en cocina porque no acaba matando el sabor del acompañamiento.
Comimos el Menú del Día, un sábado. 11€.
De primero, Ensalada Rusa Clásica. Rica.
Fabada. Suave, nos la traen emplatada, aunque nos preguntan dos o tres veces si queremos repetir, cosa que hacemos, porque estaba muy buena.
El compangu muy rico, con un toque picantín, aunque repito, es una fabada suave.
De segundos, Ternera Guisada, con patatas fritas. Muy buena. La carne se deshace sola.
Escalopinos al Queso de Los Beyos. Buenísimos. Carne tierna y el queso aporta pero sin matar el plato.
De postre, Crema de Queso los Beyos con Miel. Una especie de requesón buenísimo y suavín.
Crema de Queso Los Beyos con Sirope de Chocolate. Igual, pero con el toque de chocolate.
Y Flan Casero.
Con cafés, agua y unas cervezas, pagamos 11€ por cabeza. Como veis, impagable. Y comer con esas vistas ...
Un paseo facilón, con unas vistas increíbles, un pueblín precioso y en medio de una foz llena de pequeñas cascadas y xanes, acabando en una fartura en un restaurante en medio de la montaña con una rcp excepcional. Merece la pena.
2 comentarios
Desde que está cerrado el complejo hotelero de Vidosa, éste es uno de los pocos puntos donde comer en la N-625 y cumplen sobradamente con mucho mérito, alejados de todo.
Sí, exáctamente. Mucho mérito.
Gracias por comentar.
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