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Calidad: 3/5
Precio: 27€
Precio: 27€
Comentarios: Hoy vamos a visitar las Minas de Texeo, un sitio que sobrecoge y emociona, por la belleza del lugar, y por el duro trabajo que realizaron allí los mineros. Un sitios escondido, en medio de la nada, al que cuesta un poco llegar, pero que, sin duda merece la pena.
Vamos a dividir la Farturruta de hoy en dos. La primera parte, un paseín de apenas 1,2kms (2,4kms ida y vuelta) y 120m de desnivel hasta el poblao de Rioseco. Y si os animáis, os proponemos que sigáis hasta las Minas de Texéu, que ya incrementan la Farturruta a un total de 5kms (10kms ida y vuelta) con casi 700m de desnivel. 4h y media de Farturruta. Eso sí, mucho cuidao si decidí hacer la segunda parte de la ruta con las condiciones atmosféricas. Si hay niebla o está muy nublao puede llegar a ser peligrosa.
Salimos del pueblo de Ḷḷamo, en Riosa. A la entrada del pueblo tenéis una pequeña zona donde dejar el coche.
Con lavadero muy bien conservado.
En la misma plaza ya encontramos un cartel indicador de la ruta. Por lo menos la primera parte hasta Rioseco.
Comenzamos a callejear por el pueblo, muy guapo por cierto.
Y siempre siguiendo las indicaciones hacia la mina.
Poco a poco vamos saliendo de Ḷḷamo.
Y tras un pasadizo estrecho entre árboles, se nos abre un claro espectacular por el que da gusto pasear.
Llaneamos, e incluso tenemos alguna pequeña bajada, hasta que llegamos a cruzar el río Ḷḷamo.
A partir de aquí comienza un repechín hasta el pueblo de Rioseco. Nada duro.
Vemos aparecer las primeras casas.
El poblado se construyó en 1892 por la compañía inglesa The Aramo Cooper Mine Ltd., para la extracción de cobre y cobalto.
Parece que en 1888, el ingeniero belga Alejandro Van Straalem y Urlino las descubrió por los movimientos de las hojas de un árbol a pesar de la calma del día, y al acercarse comprobó que existía una chimenea por donde salí aire del interior de la tierra.
La mina tuvo actividad desde 1897 hasta finales de la primera guerra mundial, explotado como es decía por The Aramo Cooper Mine Ltd. Y desde 1947 hasta 1960 por la Sociedad Minero Metalúrgica Asturiana S.L. Siendo la mina de cobre más importante de Asturies, con 2000 metros de galerías, una planta de tratamiento de mineral y un poblado a pie de la propia mina.
Este poblado fue rehabilitado en 2011, aunque sin darle un uso concreto. Es una auténtica pena ver el estado de abandono que tiene ahora tras la fuerte inversión que recibió. Aun así, ese aire decadente le da todavía más un aire más impactante al lugar.
En la parte alta se encuentra un mirador, muy bien integrado en el entorno, desde el que ves todo el poblado, Ḷḷamo, todo el Aramo, Uviéu y hasta la costa.
Merece la pena subir hasta allí y verlo.
Subimos un poco más y encontramos una bocamina reconvertida en un área recreativa.
Nos asomamos a la bocamina. Conocida como Socavon de Rioseco, o más comunmente, La Casa Candanal.
Podéis asomaros un poco por dentro.
En este momento es donde tenéis que tomar una decisión, si seguir explorando el poblao o si seguir subiendo hasta las minas primitivas. Desde este punto, sería subir 470m más, en 4kms. No es como subir continuamente escaleras, pero casi. Pero tranquilos, que se puede hacer. Nosotros decidimos seguir subiendo. Salimos de la zona del área recreativa y vemos el camino de subida.
Antes de crear un sistema de cables, poleas y carretas, este era el antiguo camino carretero que va subiendo por los distintos niveles de la mina. Nosotros lo vamos a subir con una cámara y una mochila, imaginaos si fuera trabajando.
Son entre 47 y 52 revueltas (no está muy claro, y yo no me puse a contarlas la verdad) de subida. Preciosa. Entre bosque, y de vez en cuando abriéndose algún claro con unas vistas increíbles.
La verdad es que perdimos el número de revueltas que dimos, se hace un poco dura la subida, pero sabíamos que iba a merecer la pena.
Poco a poco salimos de la zona de bosque y encontramos un gran claro.
Es la zona de la Campa les Mines. Ya no hay revueltas, pero las vamos haciendo nosotros para subir la pared.
Llegamos al 2º piso de las minas modernas (el primero correspondería a la Casa Candanal). Comenzamos a ver construcciones auxiliares.
Y en seguida, una bocamina.
Seguimos pasando edificios auxiliares, en estado de ruina. La Casa del capataz.
Y por alguna escombrera.
Pasamos algún respiradero. Sin señalizar, así que ojo donde ponemos los pies.
Más bocaminas.
Y un paisaje espectacular.
Por fin llegamos a las Minas del Socavón y Arrebolléu. De origen neolítico. Socavón, ya sabéis que es una mina de monte, o un agujero que se cava en la tierra. Y Arrebollar es caer rodando por un sitio cuesto.
Cuesta un poco encontrarlas, están un poco escondidas. El GPS nos ayudó bastante.
Minas de cobre y cobalto, explotadas en el SXX, pero de origen neolítico.
Como os contaba antes, tras varias prospecciones, el ingeniero belga Alejandro Van Straalem y Urlino, en 1888, encontró restos de antiguas culturas que se dedicaron a la explotación de estas minas. 16 esqueletos humanos, restos de otros 14 esqueletos y también instrumentos de trabajo elaborados con silex y restos de animales.
Los esqueletos encontrados en la llamada "Galería de los esqueletos" dan a entender que pudieron sufrir accidente minero. Un accidente minero de hace unos 4400 años. Pero hay expertos que comentan que no son producto de accidentes de mina sino que reutilizaban las galerías ya explotadas como lugares de enterramiento
Esta forma de enterrar a sus muertos era un rito exclusivo de la cornisa cantábrica, ya que en otras minas del continente europeo no se encontró ninguno. Y la conclusión generalizada a la que se llega en la actualidad es que se dieron las dos casuísticas, unos esqueletos se deben a accidentes mineros y otros a entierros rituales.
Pero también encontraron una avellana tallada, una fuente que vertía el agua sobre un cráneo humano e incluso un esqueleto de un oso
Ya en aquella época, con las herramientas que tenían, consiguieron excavar galerías de 150m de longitud, de las que extrajeron unos 15000 metros cúbicos de material. Un sitio absolutamente sobrecogedor por la unión de hombre y naturaleza. La fuerza y el ingenio humano en las sociedades primitivas, que continuó en una segunda vida, pero también en unas condiciones durísimas, en el SXIX y XX.
Podéis bajar hasta las minas, con cuidao, y meteros dentro, sentir las corrientes de aire, adaptaros a la luz, comprobar los cambios de temperatura y haceros una idea del trabajo que hicieron aquellos hombres hace 4000 años.
Es uno de los sitios más impresionantes que vi nunca.
Lo que concluyen los expertos es que no hay mina en Europa con tantas singularidades.
Salimos de la mina y disfrutamos de las vistas.
Sobrecogidos, volvemos por nuestros pasos hasta Ḷḷamo. Por el camino de vuelta todavía vimos alguna bocamina más que se nos pasó a la subida.
Ya de vuelta al coche nos fuimos a comer al Bar El Puente, en L'Ará.
Parrilla con aparcamiento propio, y amplia terraza. incluso ponen terraza también sobre el Rio Riosa.
Dentro, zona de barra con mesas para comer o tomar algo.
Y en un lateral, comedor. Se aconseja reservar, sobre todo de fin de semana, porque cuando fuimos nosotros estaba lleno. De domingo hacían cordero a la estaca, queda pendiente de probar otro día.
Allí lo que manda es la parrilla, y la hacen muy buena. Pedimos para empezar una Ensalada Mixta. Bien.
Lacón a la Parrilla. Muy rico. Y debajo del lacón, unas Costillas a la Parrilla. Pelín duras. Pero bien.
El día acompañaba y nos propusieron tomar los postres en la terraza. Tarta de la Güela. Muy rica.
Y Flan con Nata. Sí, ahí debajo hay un flan. Muy rico también.
Tienen sidra y la echan en la terraza, dentro del comedor no. Nosotros bebimos agua y una cerveza. Pagamos 53,10€. A 27€ por cabeza. Sitio recomendable, queda pendiente de probar ese cordero a la estaca que tiene muy buena pinta.
Una Farturruta distinta, con uno de las minas más espectaculares que puedes ver en Europa, historia viva, desde neolítico hasta el SXX. Hombres y mujeres conformando el paisaje, la tierra, prácticamente con sus manos, incluso dando su vida y enterrándose allí. Para comer, una parrilla en Riosa a la vera del rio que os va a gustar.
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