Dirección: Frente a la Iglesia. Ouviñana - Cuideiru
Teléfono: 985 596 185
Calidad: 3/5
Precio: 28€
Comentarios: Recorrer la costa asturiana siempre es un espectáculo, pero presta todavía más cuando recorres sitios poco conocidos y puedes hacerlo en soledad. Hoy os vengo a hablar de una Farturruta muy fácil, con unas vistas preciosas, y un par de sorpresas que os van a encantar.
La Farturruta son 10kms, y apenas tiene 100m de desnivel. Lo que supone bajar a la primera playa y subir en la última, que ya sabéis que rara es la playa asturiana (y menos en el occidente) en la que no haya desnivel. Tardamos 3h y media en hacerla.
Nos vamos a la costa asturiana, a Ouviñana, conceyu de Cuideiru. E iremos caminando entre playas, por lo que es indispensable que vayáis cuando la marea esté baja. Si está alta, no os preocupéis, que podéis ir de pueblo en pueblo y asomaros a cada playa, pero no es lo mismo. Nosotros a la ida fuimos por las playas, y a la vuelta, volvimos por carretera. Son carreteras entre pueblos, hay que tener un poco de cuidao, sobre todo en temporada alta, pero en general, apenas encontrarás coches.
Salimos de la Playa de Cueva. Tenéis zona para aparcar en el mirador, donde encontraréis una chalana preciosa. Aldebarán se llama el barco que preside unas vistas imponentes sobre el Cabo Vidíu.
En el mismo mirador, encontrarás el acceso de bajada a la playa. Son 80m de bajada en zig zag.
Con unas vistas maravillosas sobre la playa.
La bajada hasta la playa se hace por un caminín ganao a la montaña. Se baja cómodo y sin mayor problema.
La playa es de cantos rodaos, que producen un estruendo sobrecogedor cuando los arrastra el agua con la resaca. Poder disfrutarlo en silencio es una maravilla.
Aunque también encontramos tramos de arena. Nos recuerda mucho a la vecina playa del Gavieiru o Silencio, de la que os hablé en esta Farturruta.
Si nos damos la vuelta, vemos el Cabo Vidíu. Con su faro.
La playa está llena de pequeños recovecos y cuevas donde es indispensable entrar a investigar.
Y llegamos a la Punta del Gallu, que indica el final de la Playa de Cueva. Repito que tenéis que vigilar las mareas, u os resultará imposible continuar la Farturruta a partir de aquí.
Entramos en la Playa de Vallina (o del Gallu).
Como curiosidad, deciros que el nombre de Gallu no proviene de la abundancia de esos animales en la zona, se debe, probablemente a la terminología de origen céltico Gallo, que significa piedra.
Un enorme pedrero, con alguna zona llena de arena que además nos recibió con el arcu la vieya (arco irís).
La playa de Vallina es enorme, algo más de 1km, y la marea casi nos deja a mitad de camino de la misma, como podéis comprobar en la foto. De todos modos, a lo largo de la playa hay varios accesos.
Llegamos a uno de los atractivos de la playa. El Molín de Pulido. También lo llaman del Llano o de Vallina.
Un molín a pie de playa, que aprovechaba la desembocadura del Vivíu, el nombre del regueru que también da nombre al pueblo, aunque en castellano se conozca como Vivigo. También se conoce como Boumión.
El entorno es precioso, y merece una parada, incluso un poco más arriba se encuentra otro molín, el de Prudencio. Recordemos que Ouviñana es una zona abundante en cultivo de grano: trigo, escanda o miyu. Pero nosotros no fuimos porque ya no estábamos quedando sin playa debido a la marea.
Llegamos al segundo gran atractivo de la Playa la Vallina, que es el salto de agua que forma el regueru de La Vallina, y que desemboca en la playa de esta forma tan guapa. Además, nos salió el sol.
Merece la pena echar la vista atrás, ver el Cabo Vidíu, con su Faro, y la preciosidad de la playa La Vallina.
El final de la playa ya se convierte en un pedrero. Cuidao con los tobillos.
Encontramos la rampa que nos permitirá salir de la playa. Pero antes decidimos ir a investigar la zona de la Punta d'Esquitón.
Llegamos al final de la playa, a la Punta d'Esquitón, que separa la Playa de Vallina de la de Gancéu.
La marea crea pequeñas pozas y un paisaje "marciano" espectacular. Incluso si os aventuráis a la Playa de Gancéu encontraréis alguna roca con arco icónica que merece la pena ir a fotografiar.
Nosotros volvimos a la rampa, donde encontraréis alguna chalana. Tiene mérito sacar la barca por esa playa de mar tan abierta.
Subimos poco a poco por la rampa y vemos la Playa La Vallina. Espectacular.
Ya os dije que la vuelta la hicimos por el interior, por las playas, debido a la marea ya era imposible. Así que subimos por pista (hay que recuperar esos 80m de desnivel de la bajada) hasta Valdréu.
Es un camín con carretera, pero por la que apenas pasan coches.
Hórreos y paneras.
Alguna capilla de alguna casona.
E incluso pasas paralelo a la vía de la FEVE (tranquilos, con la cantidad de trenes de FEVE que pasan por el occidente asturiano, casi os puedo prometer que no os cruzaréis con ninguno).
La senda está perfectamente indicada en todo momento.
Llegamos a Ouviñana, al punto donde dejamos el coche.
Desde allí podéis ir caminando o en coche hasta el sitio donde vamos a comer. El Bar Café. Tiene un gran aparcamiento en frente, en la zona de la iglesia.
El Bar Café es un clásico de la gastronomía asturiana, lleva abierto desde 1929. Es un local enorme. Según entras zona de barra, donde te echan sidra. Ambiente guapo, además de barra, de los que prestan. A lo largo de todo el local mesas para comer, y os recomiendo reservar porque se llena.
Tiene comedor amplio. Y una terraza exterior. Nosotros comimos en la zona de la barra.
Nos pusimos en manos de María Cotiello, una farriega más, y pedimos los clásicos de la casa. Comenzamos con Caldo de Marisco. Muy, muy bueno.
No estábamos en temporada, pero si hay Pimientos de Padrón, hay que pedirlos.
Otro indispensable de la casa, el Pulpo al Ajillo. Un espectáculo, perfecto de punto, y una salsa para acabar con las existencias del pan.
Fritos de Pixín. Muy buenos.
De postre, Copa de Helao de Mandarina, con Requesón y Reducción de PX. Lleva un polvo de pistacho. Está brutal.
Y Tarta de Queso. Rica.
Para beber, Sidra Zythos. La DOP del Llagar Herminio. Estaban a reventar de gente, así que nos dejaron un nomechisques y nos la echamos nosotros.
Pagamos 84.50€. 3 Personas, a 28€ por cabeza. Gran sitio. Muy recomendable. Nos dijeron que el pescado y el marisco es de primera, así que habrá que volver a probarlo.
Una Farturruta preciosa de playas, muy desconocidas, con un sonido sobrecogedor gracias a los cantos rodaos, un antiguo molín a pie de playa y una cascada que descarga con fuerza en la propia arena. Para comer, un clásico de Ouviñana donde comerás el mar que los rodea, pero también guisos y platos de interior. Muy recomendable
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